SAN JUAN – El presidente de la Cámara de Representantes, Carlos ‘Johnny’ Méndez, rindió homenaje a Juan Benabe Guzmán, de 100 años, y quien fuera el primer alcalde del municipio de Luquillo por el Partido Nuevo Progresista, logrando esa gesta en las elecciones generales de 1968.
El líder legislativo también informó que radicará un proyecto de ley para designar un tramo de la carretera estatal PR-991, el cual transcurre por Luquillo, con el nombre del exalcalde.
“Para nosotros es un honor tener la oportunidad de reconocer en vida a un servidor público que dejó una huella tan profunda que luego de 41 años después de salir de la Casa Alcaldía, todavía su obra se siente en todo su amado Luquillo, me refiero al siempre alcalde Juan Benabe Guzmán. Su legado es el de un líder íntegro que dedicó su vida al bienestar de su pueblo, un hombre de familia ejemplar y un ciudadano cuya mayor aspiración ha sido ser recordado como lo que fue: un luquillense que amó profundamente a su tierra y trabajó incansablemente por su pueblo”, comentó Méndez.
En una emotiva ceremonia celebrada en el salón de los Próceres de El Capitolio, el Presidente Cameral hizo entrega de una Moción de Reconocimiento a Benabe Guzmán, destacando su trayectoria en el servicio público que se extiende por varias décadas.
Junto a Benabe Guzmán estuvo parte de su familia y amistades.
También participaron del reconocimiento la senadora por el Distrito de Carolina, Marissa ‘Marissita’ Jiménez, el actual alcalde, Jesús ‘Jerry’ Márquez, el representante Emilio Carlo, así como el portavoz de la delegación del Partido Popular Democrático en la Cámara Baja, Héctor Ferrer, hijo.
Benabe Guzmán nació el 15 de mayo de 1925 en el municipio de Luquillo. En 1968, con el surgimiento del Partido Nuevo Progresista (PNP) bajo el liderato de don Luis A. Ferré, aceptó el reto de aspirar a la alcaldía de su pueblo, convirtiéndose en parte de la historia política al figurar entre los fundadores de dicha colectividad.
Ese mismo año se convirtió en el primer alcalde de Luquillo electo por el PNP, hito que marcó el inicio de una gestión caracterizada por la perseverancia y el compromiso con su pueblo. Su visión de desarrollo se consolidó en 1976, cuando nuevamente regresó a la alcaldía con el respaldo de la asamblea municipal.
Desde entonces, impulsó proyectos de gran envergadura: la creación del Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) con servicios médicos las 24 horas, ambulancias y farmacia; la construcción de parques y canchas en todos los sectores; la organización de programas deportivos y recreativos; y la fundación de la Banda Municipal de Luquillo con instrumentos provistos gratuitamente.
En el ámbito educativo, gestionó la construcción de la escuela superior Isidro A. Sánchez y la escuela elemental Camilo Valles Matienzo, además de promover el establecimiento del Puerto Rico Junior College y la Universidad del Turabo, facilitando oportunidades de estudios gratuitos en trabajo social y carreras técnicas. Asimismo, amplió el acceso a la vivienda mediante la construcción de los complejos de vivienda pública El Cemí, Yukiyú y Playa Azul, la urbanización de bajo costo Alamar y los complejos residenciales Sandy Hills y Playa Azul I-IV, entre otros.
