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SAN JUAN – A cinco años de haberse aprobado su elegibilidad para recibir fondos de recuperación por los daños causados por el huracán María, miles de iglesias aún no han logrado obtenerlos debido a la inacción de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) y la Oficina Central de Recuperación y Reconstrucción de Puerto Rico (COR3), lo que hace que se plantee la posibilidad de acudir a los tribunales, según se informó el martes.
Iván Casals, quien ha sido el asesor y portavoz de las comunidades de fe en Puerto Rico y varios municipios en los últimos cinco años, manifestó que ambas agencias han obstaculizado los esfuerzos de rehabilitación debido a la inacción y mala gestión de los casos y reclamos presentados por estas comunidades. Uno de los ejemplos mencionados fue que aún no se ha creado una división específica para evaluar a estas organizaciones, que tienen una naturaleza distinta a la de las reclamaciones presentadas por el sector gubernamental y los individuos.
«En febrero de 2018, las iglesias o casas de oración fueron aceptadas como elegibles para recibir fondos federales disponibles a través de FEMA bajo la categoría de entidades sin fines de lucro, de forma retroactiva. Sin embargo, en todos estos años, ambas agencias han impedido la obtención de estos fondos y no han respondido a nuestras solicitudes», dijo Casals en declaraciones escritas.
Por su parte, el pastor Moisés Román, presidente de la Fraternidad Pentecostal, estimó que el 40 por ciento de las iglesias en Puerto Rico sufrieron algún tipo de daño debido al paso del huracán María. «La Fraternidad Pentecostal, que está compuesta por más de 2,200 iglesias, no ha logrado reparar el 10 por ciento de estas debido a las condiciones impuestas por las agencias encargadas de distribuir los fondos», enfatizó Román.
Otro ejemplo que se menciona es el hecho de que se ha solicitado que se exima a las casas de oración del pago del 10 por ciento del total reclamado, ya que, al tratarse de entidades sin fines de lucro, no cuentan con esa cantidad para iniciar las obras. «Solicitamos que se adelante dinero de inmediato, como se hizo con todos los demás proyectos en la isla, para poder contratar asesores, consultores, ingenieros, arquitectos y cualquier otra persona que pueda ayudarles a completar sus proyectos», dijo el asesor.
Además, se solicitó a FEMA que proporcione un mecanismo automático para ajustar el concepto de inflación desde el momento en que se hicieron los estimados originales hasta el momento actual, en el que los precios son más altos. «También hemos pedido que se flexibilicen las reglas de contratación, ya que en Puerto Rico no hay suficientes contratistas, ingenieros, arquitectos y otros profesionales disponibles, ya que están contratados en proyectos gubernamentales y privados que ya están en marcha», subrayó Casals
