Por: Sonny Falú
sonnyfalu@yahoo.com
“De la abundancia del corazón habla la boca”, proclama un proverbio muy cacareado pero muy poco entendido… La VERDAD MONDA Y LIRONDA es que NADIE HABLA DE COMIDA CUANDO LA TRIPA CANTA VICTORIA… Y sabemos que los que pregonan sus conquistas amorosas y aventuras románticas son gente que anda besando sapos y ninguno se le convierte en príncipe o princesa…
En esas cosas meditaba yo al escuchar las reacciones de la gran mayoría de la gente ante la tragedia del suicidio de ROBIN WILLIAMS… Me sorprendía que se sorprendieran… Digo, me tomó por sorpresa y me provocó tristeza pero, ¿sorprenderme? NO… ¿Así de desconectados estamos?
Oye, SABEMOS, o DEBERÍAMOS SABER que detrás de una persona cómica de carretilla, de esos que dicen un chiste tras otro y no pueden parar, lo que se esconde es un dolor que les lacera el alma… Y no hablo de los cómicos profesionales, que aunque Robin Williams era uno, pero SEGUÍA MONTA’O AUN CUANDO SE BAJABA DEL ESCENARIO… No respiraba, era chiste tras chiste, como quien grita y canta para silenciar lo que su corazón reclama…
Muy tristemente, en la escuela estudiamos el poema REÍR LLORANDO y son muy pocos los maestros (casi NINGUNO), que profundizan en el mensaje avasallador de ese clásico poema que dice:
Viendo a Garrick, actor de la Inglaterra, el pueblo al aplaudirlo le decía: Eres el más gracioso de la tierra y el más feliz. Y el cómico reía.
Una vez ante un médico famoso, llegose un hombre de mirar sombrío:
-Sufro -le dijo- un mal tan espantoso como esta palidez del rostro mío. Nada me causa encanto ni atractivo; no me importan mi nombre ni mi suerte; en una eterna melancolía muriendo vivo, y es mi única pasión la de la muerte.
-Me deja- agrega el médico –perplejo vuestro mal, y no debo acobardaros; Tomad hoy por receta este consejo: solo viendo a Garrick podéis curaros.
-A Garrick ? -Si, a Garrick…La más austera sociedad lo busca ansiosa; todo aquel que lo ve muere de risa; Tiene una gracia artística asombrosa.
-¿Y a mí, me hará reír? -Ah, sí, os lo juro; el, si, nada más él… –Así, -dijo el enfermo- no me curo; ¡YO SOY GARRICK, CAMBIADME LA RECETA!
Hay que promover el apoyo para con quienes sicológica o QUÍMICAMENTE (si hay condiciones químicas) necesitan canalizar dolores… Eso es COMPASIÓN, eso es MISERICORDIA… Lo demás es MORBO… GENTE, esa persona que conoces y no para de hablar, o es un escritor que necesita SENTARSE A ESCRIBIR sus historias, o es un ser humano que carga un dolor profundo…
TENEMOS que escuchar DESDE el corazón… No lo hicimos con nuestro HÉCTOR LAVOE cuando cantaba: “…Y NADIE PREGUNTA, SI SUFRO O SI LLORO, SI TENGO UNA PENA QUE HIERE MUY HONDO…”
…Y lo escuchábamos (nosotros y los demás) para DIVERTIRNOS… Quizá, si hubiéramos ESCUCHADO Y ENTENDIDO (los cercanos a él), aún lo tendríamos por ahí cantándonos: “…YO SOY EL CANTANTE, PORQUE LO MÍO ES CANTAR Y EL PÚBLICO PAGA PARA PODERME ESCUCHAR…” ¿Escuchábamos?