Manolo Rodríguez
Estudios en Psicología
El alzheimer es un tipo de demencia que ataca principalmente a personas de 65 años en adelante. Aunque se conocen casos aislados de personas con esta enfermedad de menor edad. Los síntomas mayormente están asociados con cambios físicos y funcionales en el cerebro. Las personas que padecen esta enfermedad pueden tener dificultad para recordar cosas que sucedieron recientemente. Con el tiempo pueden dejar de reconocer a las personas, como también tener problemas para hablar, leer o escribir. Pueden no recordar cómo asearse, entre otras cosas, del quehacer diario. Cuando la enfermedad progresa, se pueden volver ansiosos, agresivos o deambular lejos de su casa. Esta enfermedad puede volverse estresante tanto para los familiares como para los cuidadores, ya que, al progresar la enfermedad, necesitarán cuidados totales.
Las causas que provocan esta enfermedad no se pueden determinar a ciencia cierta. Pero hay unos factores que hacen a unas personas más propensas a padecerlas que otras. La genética es uno de estos factores sumamente importante. El estilo de vida, como la alimentación, son otros de los factores que los científicos están estudiando para determinar qué relación hay entre estos. Por último, y no menos importante, tenemos el medio ambiente en el que nos desenvolvemos. Entre este último se está tomando en consideración el nivel de educación, traumatismos en la cabeza, entre otras influencias ambientales.
Los síntomas de esta enfermedad son varios. Entre todos, estos son los más importantes y fáciles de detectar: la pérdida de memoria afectando el día a día, pérdida de capacidad para seguir un plan, pérdida de la capacidad para completar tareas habituales, confusión de tiempo y espacio, extraviar cosas, problemas al hablar, cambio de personalidad y cambios de estado de ánimo.
Lamentablemente, aún no existe ningún medicamento que cure esta enfermedad. Pero los científicos han logrado grandes avances para entender la enfermedad y en el desarrollo de medicamentos experimentales. La FDA (por sus siglas en inglés) aprobó varios medicamentos para controlar los síntomas. La mayoría de estos medicamentos funcionan mejor en personas que están en una etapa temprana o intermedia de la enfermedad. Estos medicamentos lo que tratan es de retrasar los síntomas de la enfermedad, pero ninguno tiene la capacidad de detenerla o curarla totalmente.
Fuentes: National Institute on Aging | Bright Focus Foundation



