Por: Redacción Presencia
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WASHINGTON, DC- El comisionado residente, Pedro Pierluisi, presentará hoy una enmienda en el pleno de la Cámara federal a la Ley de Autorización de la Defensa Nacional para el Año Fiscal 2015, (NDAA, por sus siglas en inglés), que permitirá al Departamento de Defensa remover artefactos explosivos sin detonar de la isla de Culebra, la cual fue utilizada como campo de entrenamiento militar durante siete décadas.
Además de sus gestiones en la Cámara, Pierluisi está trabajando de cerca con los senadores Richard Blumenthal de Connecticut y Kirsten Gillibrand de Nueva York, quienes buscan presentar una enmienda similar durante la tarde de hoy ante el Comité de las Fuerzas Armadas del Senado federal.
El Cuerpo de Ingenieros está descontaminando ciertas áreas en Culebra bajo el Formerly Used Defense Sites Program (FUDS). No obstante, el Departamento de la Defensa argumenta que una ley federal del 1974, prohíbe el uso de fondos federales para descontaminar una parcela específica de 570 acres que constituyó parte de la zona de bombardeo. De éstos 570 acres, unos 400 fueron traspasados al gobierno de Puerto Rico en el 1982.
El Departamento de Defensa sostiene que la Ley del 1974 continua vigente a pesar de la aprobación de una ley federal subsiguiente que requiere la limpieza de lugares que fueron utilizados militarmente. Como resultado de esta interpretación restrictiva, la parcela de 400 acres en Culebra es el único sitio-de miles a través de la nación- que el gobierno federal sostiene que está impedido de limpiar por ley.
“Mi enmienda le permitirá al Cuerpo de Ingenieros descontaminar esas zonas dentro de la parcela de 400 acres de uso frecuente, tales como la Playa Flamenco, las áreas de acampar, un sendero peatonal y otras playas. La situación actual es un riesgo para la seguridad humana, ya que en esta zona de Culebra, la cual es visitada por más de 300 mil personas al año, hay bombas sin detonar. Un informe reciente del Departamento de Defensa concluyó que, desde el 1995, han ocurrido más de 70 incidentes en los que personas han encontrado municiones que pudieron haber causado grave daño”, dijo Pierluisi.
“Los ciudadanos americanos en Culebra se sacrificaron para que nuestros militares pudieran recibir el entrenamiento necesario para desempeñarse en combate, impedir la agresión y proteger nuestras libertades fundamentales. A cambio, el Congreso debería dar este pequeño paso para remover la barrera que le impide al Departamento de Defensa eliminar los riesgos a la seguridad personal que todavía existen en Culebra como resultado de los entrenamientos”, expresó Pierluisi.