“13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición
(porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero, para que en
Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la
fe recibiésemos la promesa del Espíritu.”
Gálatas 3:13-14
Por: Apóstoles Iván García y Amarilys Ramos/ Para Presencia
Tú, que naciste de nuevo al recibir a Jesucristo a través de la oración de fe, eres un heredero de Abraham según la promesa. Ya estás bendecido. Tu espíritu fue recreado y ya eres excelente, ahora necesitas cambiar y progresar en la manera de pensar. Derribando fortalezas del enemigo (engaños, mentiras, argumentos contra el conocimiento de Dios) y pensando como la Palabra de Dios.
Tú, que hiciste a Jesús el Señor de tu vida, fuiste redimido de la maldición y también del pasado. Eleva, entonces, tus pensamientos, tu eres un digno hijo de Dios, ten conciencia de bendición y camina en la verdad.
Di cada mañana: “se levantó el bendecido” No permitas que las circunstancias controlen tus pensamientos, en cambio, crea y habla la Palabra de Dios que es la verdad. Tú tienes autoridad para decretar la palabra de Dios, donde la declares cambiará toda situación.
Hazlo, porque Satanás intentará desenfocarte trayéndote complicaciones en el trabajo, en el vecindario, en la familia y aun en la iglesia. Pero tú debes discernir sus artimañas y moverte bajo la sabiduría de Dios, perdonando y bendiciendo a aquellas personas que te persiguen.