SAN JUAN – El secretario del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Waldemar Quiles, anunció que personal de la Oficina del Comisionado de Navegación instalaron, esta pasada semana, una serie de nuevas boyas acústicas en el área del Caño Martín Peña, así como en el río Río Piedras, para alertar a la ciudadanía sobre la presencia de manatíes.
Como resultado directo de esta acción, agentes de la Unidad Marítima de la Policía Municipal de San Juan expidieron dos boletos de $250.00, cada uno, por exceder los cinco nudos de velocidad en zonas designadas sobre la presencia de manatíes.
“Continuando con nuestro esfuerzo de buscar una mayor seguridad en la navegación, esta pasada semana, personal adscrito a la Oficina del Comisionado de Navegación del DRNA, estuvieron colocando boyas flotantes para alertar a los usuarios de embarcaciones sobre la posible presencia de manatíes en varios cuerpos de agua, incluyendo el Caño Martín Peña, el cual conecta con varias lagunas, incluyendo la del Condado y San José. De igual forma, colocaron boyas en las zonas del río Río Piedras, un tributario importante en la zona metropolitana”, comentó el secretario del DRNA.
“Estas boyas orientan al navegante que está entrando en una zona que es utilizada por manatíes. Las boyas claramente establecen que la velocidad máxima en estas áreas no puede superar los cinco nudos. Agradecemos al personal de la Oficina del Comisionado de Navegación por esta acción. En el DRNA vamos a continuar rotulando para informar a nuestra ciudadanía e implementando las leyes y regulaciones vigentes sobre la navegación en Puerto Rico”, destacó Quiles.
Este esfuerzo se une al realizado hace varias semanas en otros lugares como en los cayos de Caracoles, Mata La Gata y Collado, en el sector La Parguera en Lajas.
El manatí es un mamífero marino que habita en las costas y en las desembocaduras de los ríos.
Quiles reiteró su exhortación a todos los propietarios de embarcaciones a seguir la Ley 430-2000, más conocida como la ‘Ley de Navegación y Seguridad Acuática de Puerto Rico’ la cual contempla como delito el navegar de manera negligente, incluyendo la entrada en zonas exclusivas para bañistas y manatíes.