Por: Juan Miguel Mercedes Pérez, Escritor / Para Presencia
A los hombres nos gustan las mujeres con buenos valores, de buenos sentimientos, trabajadoras, hogareñas, que sean excelentes madres y esposas.
Que no sean explotadoras, infieles y que no sientan el deseo de superación y progreso.
Cuando los hombres pensamos en nuestras metas y somos optimistas nos gusta compartir con una mujer que piense como nosotros.
Si es así es muy probable que ambos hombre y mujer triunfen. Si la mujer es negativa con los proyectos que desea realizar el hombre o su pareja se hace más difícil el progresar.
Por esa razón los hombres preferimos a una mujer con carácter y deseo de superación.
Nos gusta la mujer cariñosa y que nos consienta. Cuando una mujer posee belleza física, espiritual e inteligencia muchos hombres quedamos impactados y hay quienes se sienten intimidados porque las ven como superior a ellos.
La gran mayoría de los hombres las preferimos inteligentes y con buen dominio y control de la palabra.
Nosotros los hombres somos más carnales y muchos enloquecemos con una mujer bella físicamente.
¿De qué sirve tener a nuestro lado a una mujer hermosa físicamente y que nos trate de manera indebida?
La gran mayoría de los hombres queremos una mujer excepcional, que sea buena esposa, buena amante y que nos represente como hombres.
¿Existirá? Lo dejo a tu discreción.