SAN JUAN – Ante la alta incidencia criminal, Ariel Torres Meléndez, presidente de la Corporación para la Defensa del Poseedor de Licencia de Armas de Puerto Rico (CODEPOLA), urgió el martes a la ciudadanía gestionar el permiso de portación de armas, pero bajo ningún concepto poner en riesgo su libertad por armarse de forma ilegal e irresponsable, incumpliendo con la Ley de Armas de Puerto Rico.
“Antes, los ciudadanos gestionaban la licencia de armas y con eso resolvían, ya que obtenían un arma para mantenerla en su residencia por cualquier situación que ocurriese. Pero ahora, las cosas han cambiado y nadie está exento de enfrentar una agresión criminal en la calle debido a un asalto o ‘carjacking’, saliendo del cine, un centro comercial o un supermercado”, dijo Torres en declaraciones escritas.
“Puerto Rico no puede esperar más y deben dar paso al Proyecto del Senado 439, de la autoría del senador Nelson Cruz Santiago, que pretende crear la nueva Ley de Armas tan necesaria en nuestro país”, agregó.
Sostuvo que el senador Henry Newman, presidente de la Comisión de Seguridad del Senado, aseguró que el Proyecto Sustitutivo sería presentado a principios de la sesión legislativa que dio comienzo el lunes.
El presidente de CODEPOLA explicó que la ciudadanía debe estar clara que la nueva Ley Doctrina del Castillo añadió un nuevo artículo al Código Penal para reconocer el derecho de la ciudadanía a defenderse legítimamente en su morada, vehículo y otros lugares, “pero esto no es por la libre. La licencia de armas no te da derecho a transportar el arma a todas partes, se requiere la portación”.
Detalló que la nueva Ley Doctrina del Castillo, de la autoría del senador Thomas Rivera Schatz, presidente del Senado, da uniformidad a las leyes vigentes con las de Estados Unidos, ampliando el tamaño del castillo en el que es legal defenderse, el cual ahora no se limita al hogar, sino que se ha extendido al lugar de trabajo, el vehículo personal y a todo espacio público donde un individuo tenga derecho a estar.
“En los últimos meses, CODEPOLA ha constatado de varios casos de ciudadanos que pudieron repeler a una agresión, gracias a que tienen su permiso de portación de armas y conocen los alcances de la Doctrina del Castillo. Tuvimos un caso de un socio que recientemente salvó su vida y la de su hermano, frente a su residencia en Río Grande. Tenemos otro en Trujillo Alto que repelió un asalto mientras cenaba con su pareja. Y como esos, un sinnúmero de casos”, describió Torres Meléndez.
Como detonantes para el descontrol y alza en la criminalidad, Torres Meléndez mencionó la deserción escolar, el aumento en el uso y abuso de sustancias controladas, sumado a la escasez de policías en la isla, han sido terreno fértil.