Por: José R. Hernández / Presencia
El Policía puertorriqueño, Javier Pagán, del Departamento de Policía de Boston y que está designado para rendir servicios a la comunidad gay de este estado, se ha convertido en una especie de héroe durante la tragedia de los bombazos cometidos en el pasado Maratón de Boston.
La imagen tomada, demuestra el ímpetu de Pagán en ayudar a un ciudadano, independientemente, ya se había detonado la primera bomba que causó estragos en la mayor parte de la ciudadanía que se encontraban viendo el final de la jornada del Maratón.
De acuerdo con el fotógrafo John Tlumacki del diario “The Boston Globe”, la imagen fue tomada «probablemente un segundo después de la explosión.»
Tlumacki describe, que Pagán fue derribado por la explosión cayendo estrepitosamente en el pavimento. Los policías compañeros de Pagán, estaban simplemente reaccionando como policías. Ellos no sabían lo que estaba pasando. Desenfundaron sus armas de reglamento, pero no para usarlas a mansalva, sino para arrojarlas al suelo, sin provocar la histeria de las personas que allí se encontraban.
Pagán y sus compañeros estuvieron muy cerca de donde explotó la primera bomba de origen casero, y no titubearon en permanecer en el perímetro, para proteger al corredor de 78 años, Bill Iffrig, quien se desplomó después de la segunda explosión.
Un “Pandemonium” fue lo que reinó en esa fracción de segundo, pero los informes Tlumacki dicen que la policía casi inmediatamente, despejaron el sentimiento de crisis que imperaba en los transeúntes.
Según el portal “dallasvoice.com”, Pagán es un oficial de 41 años que desde 1995 forma parte de la fuerza policiaca en la ciudad de Boston. En 1996 se declaró abiertamente gay y hoy día es el enlace oficial entre la policía de Boston y la comunidad gay de esa ciudad.
