LOÍZA – Aunque su historia como pueblo data de siglos de luchas, la municipalidad de Loíza estuvo establecida en uno de sus barrios, llamado Canóvanas desde el 1911 hasta el 1970, cuando el gobernador Luis A. Ferré firmó una orden ejecutiva restaurando el municipio al centro urbano como hoy lo conocemos, creando además el Municipio de Canóvanas. Hoy lunes se conmemora el 50 aniversario de la firma de dicho proyecto. Dicho logro se debió al Movimiento Cívico Pro Restauración del Municipio de Loíza, presidido por Don Ricardo Sanjurjo de Jesús, quien trabajó con otros miembros de la Junta original, como Rafael Resto, Roberto de Jesús Correa, Julio Ortiz, Zenén Clemente, Alfonso Domenech, Delfín Benítez y Jesús María Escobar, entre muchos otros conocidos en todo el pueblo como Los Restauradores.
“En estos tiempos cuando se habla de obstáculos y dificultades, es pertinente aprender de nuestros mayores. Gente con menos recursos, pero que con gran pasión, lograron que Loíza tuviera su municipalidad como le corresponde en la historia”, relató la alcaldesa Julia Nazario Fuentes.
En noviembre del año pasado, Nazario Fuentes presidió un evento donde se nombró el puente sobre el Río Grande de Loíza en honor a los loiceños que lucharon por la restauración del Municipio de Loíza. “Honramos nuestra historia reconociendo a los que nos precedieron, a los que son ejemplo por haber luchado por lo que es justo.”, expresó la alcaldesa ante decenas de ciudadanos al borde del puente la carretera PR #187, de Torrecillas al pueblo de Loíza. La estructura luce desde hoy los colores de la bandera loiceña: verde, amarillo, rojo y tiene además 12 banderas de Estados Unidos, Puerto Rico y Loíza a cada lado.