CAGUAS – “Faltaron a la amistad. Nosotros le abrimos la puerta de nuestra casa. Uno piensa que hay un interés genuino de ayudar, pero de repente uno se da cuenta de que son inversionistas”.
De esta manera, el gobernador Alejandro García Padilla expresó el martes sentirse ante el testimonio del convicto recaudador Anaudi Hernández Pérez quien expuso que se acercó al primer ejecutivo para lograr contratos en el gobierno.
“Es que Anaudi fue el que dijo que él hizo eso para tener acceso. ¿Cómo uno le dice eso a los hijos? Que aquellas personas que decían ser nuestros amigos, lo hacían para lograr acceso. Eso es terrible y es frustrante”, dijo García Padilla en conferencia de prensa.
Mencionó que al final del camino, tendrá muchos menos amigos.
“Uno se pone a repensar que personas que se acercan a uno lo hacen con esa mala sangre. Sus hijos, se hicieron amigos de mis hijos. Compartían, y de repente decir en corte, que hizo todo eso para tener acceso…”, señaló el gobernador.
Aseguró que se comunicó con el secretario de Justicia, quien le adelantó que hay dos fiscales asignados para investigar cualquier imputación. Recordó que, a raíz del caso federal, Sánchez Valle versus el Gobierno de Puerto Rico, las autoridades locales no pueden entrar en materia investigada y encausada por el gobierno federal.
Cuestionado sobre si a raíz de lo dicho hasta el momento en el caso judicial debería renunciar como primer ejecutivo, García Padilla contestó que “no”.
Insistió en que los nombramientos hechos por él no hubo influencia externa, solo recomendaciones.
En cuanto al llamado plan pirámide para recaudar fondos para su campaña, García Padilla rechazó que existiera tal plan.
Añadió que le preguntó a su exdirector de campaña Irving Faccio, quien supuestamente mencionó que no se acordaba del supuesto plan.
Finalmente, el primer ejecutivo insistió en que su campaña a la gobernación fue totalmente auditada por la Oficina del Contralor Electoral y tuvo, según él, pocos señalamientos.
“Si él violó la Ley, el que lo hizo mal fue él”, dijo el gobernador ante la admisión del convicto empresario de que recaudó fondos para dicha campaña en violación a la Ley Electoral.