SAN JUAN – El Negociado de Energía determinó el lunes que LUMA Energy tiene que ajustar las guías y parámetros para los miles de clientes comerciales e industriales que reciben una factura estimada.
“Este informe reafirma nuestro compromiso con la transparencia y la protección de los derechos de los consumidores en Puerto Rico. Las prácticas de facturación deben ser claras, justas y ajustarse a los parámetros establecidos por la ley, siempre priorizando el bienestar de los consumidores”, dijo el presidente del Negociado de Energía, Edison Avilés Deliz en declaraciones escritas.
Avilés Deliz mencionó que entre los principales hallazgos de la investigación:
Impacto de las facturas estimadas: Durante el período de enero a noviembre de 2023, un promedio de 17,254 clientes comerciales e industriales recibió facturas estimadas cada mes, representando aproximadamente el 9% de todos los clientes no residenciales.
Limitaciones en la facturación retroactiva: A partir del 18 de enero de 2024, la Ley Núm. 36-2024 establece un plazo de 120 días para realizar ajustes en las facturas estimadas, ofreciendo así mayor certeza y protección a los consumidores.
Ingresos asociados a facturación estimada: Se estimó que el monto mensual de las cuentas comerciales e industriales facturadas con base en estimaciones asciende a aproximadamente 18 millones de dólares. Toda vez que las facturas son estimadas, no se tiene visibilidad ni certeza de si dichas facturas subestiman o sobreestiman la cuantía real del consumo energético, potencialmente afectando negativamente las finanzas de LUMA o de algunos comerciantes.
Recomendaciones para LUMA: Se ordenó a LUMA adoptar medidas concretas para mejorar la precisión en sus procesos de lectura y facturación, incluyendo la implementación de medidores inteligentes y la elaboración de guías claras para la reconciliación de facturas, para así minimizar el número de facturas estimadas.
“El Negociado también identificó la necesidad de que LUMA comunique más efectivamente las disposiciones de la Ley 36-2024 a sus clientes comerciales para que conozcan sus derechos y el plazo de 120 días que tiene LUMA para hacer cualquier ajuste en una factura estimada. También se ordenó a LUMA a adoptar un reglamento específico que detalle los procedimientos de ajuste de facturas, garantizando así transparencia y equidad en el manejo de estas situaciones”, expresó Avilés Deliz.