SAN JUAN – La gerencia de GILA LLC, operador del sistema de peajes electrónicos de AutoExpreso, negó categóricamente las imputaciones contenidas en una demanda de clase que se radicó en el foro federal nombrando a GILA entre otras compañías como parte demanda que se anunció en el día de hoy.
La demanda parte de alegaciones falsas y de la desinformación, ya que la empresa Gila no fija el monto de las multas, ni recibe ganancia alguna de las multas que se imponen a los conductores que violentan la ley de tránsito, según explicó el vicepresidente de operaciones de la empresa, Luis Alberto Sánchez.
“Gila no hace política pública ni escoge el monto de las multas a cobrar. Eso lo determina la Asamblea Legislativa y la Rama Ejecutiva”, sostuvo Sánchez. “Todas las imputaciones falsas contenidas en el documento parten de premisas equivocadas con el objetivo de lacerar a la empresa. Gila se defenderá vigorosamente de este pleito frívolo lleno de teorías conspiratorias y premisas falsas”.
Reiteró que el dinero recolectado tanto de peajes como de multas se depositan en su totalidad a favor de la Autoridad de Carreteras y/o Metropistas. Gila cobra un precio fijo por transacción realizada a favor de la Autoridad de Carreteras y Metropistas y establecida por contrato. Esa tarifa no está sujeta a si se envían multas o no. Gila no tiene un incentivo monetario en fijar multas. El procesamiento de multas le genera un gasto operacional a Gila en revisión de imágenes por parte del personal, procesamiento de correspondencia, y otros costos adicionales.
“El 98.4% de todos los conductores que usan el sistema de AutoExpreso mantienen sus cuentas al día”, explico.
Entre las causas que han generado un volumen mayor de notificaciónes de multas en el sistema de peaje electrónico de AutoExpreso, Sánchez, mencionó:
1) Aumento en volumen de tránsito en PR-22 y PR-5 debido al incremento en puntos de cobro de peaje donde antes no había por conversión de peaje bi-direccional;
2) Cambio de equipo de peaje y remoción de semáforos de balance en las autopistas PR-22 y PR-5;
3) Aumento en las multas de AutoExpreso de $15 a $50;
4) Aumento en el periodo de gracia de 72 horas a 120 horas, y
5) Gran cantidad de usuarios de AutoExpreso con cuentas anónimas (alrededor de 1.4 millones).
GILA emplea a sobre 400 personas en Puerto Rico. Opera los peajes de la Autoridad de Carreteras (PR 52, PR 20, PR 53 y PR 66), opera el peaje del Puente Teodoro Moscoso, procesa además las transacciones de Metropistas que son operadas por ellos (PR 22 y PR 5), y procesa las transacciones del peaje del Municipio de Guaynabo, operada por ellos. La empresa también administra desde sus instalaciones en Puerto Rico las operaciones de peajes para varios estados en los Estados Unidos.